Hay lecciones muy importantes que todo el mundo ha de aprender en esta vida.
Por ejemplo, aprende a hacer lo que sea calladamente, con discreción, sin hacer ruido ni darse bombo. No dejes a un lado esas lecciones o pienses que conoces todas las respuestas
y que por tanto no tienes que aprender lecciones tan elementales. Mira muy dentro de ti y no dejes que el orgullo espiritual te impida ver tus fallos, pues no se te podrá usar plenamente si consientes que el orgullo espiritual se interponga. Muy a menudo el orgullo puede impedirte aprender lecciones nuevas y vitales que están aguardando ser aprendidas, e impedir tu desarrollo espiritual. Siempre hay algo nuevo y maravilloso que aprender y absorber, y tan sólo serás capaz de hacerlo cuando estés dispuesto a estar abierto y seas consciente de lo que necesitas. Persigue satisfacer esa necesidad con verdadera humildad y profunda gratitud. En esta vida nunca se deja de aprender.

Eileen Caddy

4 comentarios:

  1. Se llama siempre,
    el momento para
    aprender.

    La humildad es una virtud
    que los soberbios no
    saben practicar.

    Gracias Sina por traer
    estas reflexiones.

    Besos

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  2. Gracias a ti Marisa, por tu paseo ...
    Besos.

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  3. Cierto Juanjo, la humildad y la sencillez están más cerca de la verdad.
    Besos.

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